Cees Nooteboom recibe el premio Formentor. Una lectura recomendable para días de confinamiento (tú te confías y yo miento). Su obra es la voz de la experiencia viajera, del amor a Europa, España y Menorca. Emili de Balanzó cuenta en un libro-homenaje («Menorca a Nooteboom», Ed. S'Auba) que lo conoció en la librería Manent, frente a El Turronero. El tiempo tiene goma de borrar, además de un cuaderno donde va escribiendo aventuras y desventuras. Las voces pasadas, como la de Benito Pérez Galdós y sus «Episodios Nacionales», nos enseñan mucho sobre el presente. Pero hay lecturas selectas y demasiadas carencias. Inmersos en mensajes cargados de ataques virulentos, reproches y descalificaciones, olvidamos que la cultura vacuna contra intolerancias y fanatismos.
Necesitamos rescatar la verdad entre tantas voces, casi ahogada por zafiedades y mentiras. Sectores de una cierta ideología (alérgica a la unidad de España y a la Monarquía parlamentaria, recogidas en nuestra Constitución) critican que los militares participen en tareas de lucha contra la pandemia. Hoy los ejércitos tienen unidades contra la guerra nuclear, biológica y química (NBQ) o la Unidad Militar de Emergencias (UME). Las amenazas no dejan de existir cuando cerramos los ojos. También podríamos decir: contra la enfermedad, menos gasto en Sanidad.
Un proverbio malauí dice: «Aquel que se cree un líder pero no tiene a nadie que le siga, en realidad está dando un paseo».