QUE los clásicos patinetes de toda la vida, sin impulso eléctrico, sean todavía un recurso para que los niños se desplacen a la escuela y que los pequeños usuarios que optan por circular por el carril bici tengan que sortear a peatones adultos que invaden este espacio, como se puede comprobar en la imagen captada el lunes cerca de un colegio del centro de Maó.
QUE muchos padres no den ejemplo a sus hijos y lo dejen todo para el último momento, como lo demuestran las colas recientes en las papelerías para adquirir el material escolar.
QUE una empresa de rutas ecuestres por el Camí de Cavalls haya anunciado una limitación de peso de sus clientes, fijada en 90 kilos, para garantizar el bienestar de los animales.
QUE el personal de recepción del Consell no pueda descolgar el teléfono de atención al ciudadano porque dice que está desbordado para atender la avalancha de peticiones de tarjetas de autobús.