Toda la realeza estaba convocada este sábado a la boda de la última heredera soltera de Europa, Victoria de Suecia. Al tratarse del enlace de una Princesa heredera, todas las casas reales han enviado una gran representación, tanto de monarcas como de príncipes herederos. Entre ellos la Familia Real española casi al completo, ya que el único que faltaba era el Rey que ha decidido no viajar a la capital sueca debido a su reciente operación. La ausencia de Don Juan Carlos es junto con la de la Reina Isabel de Inglaterra la única entre los monarcas europeos que han asistido en pleno.
Entre los más aplaudidos, los Príncipes Federico y Mary de Dinamarca. Mary Donaldson ha escogido para el enlace un vestido verde turquesa con escote palabra de honor aunque acabado una fina tela semi transparente que también le cubría los brazos.
Entre las más esperadas, como siempre por su elegancia, Rania de Jordania. La Reina ha acompañado a su marido, el soberano jordano, luciendo un vestido morado de manga corta acompañado por unos zapatos del mismo tono.
Otro de los momentos más esperados ha sido el de la llegada de Alberto de Mónaco con su novia, Charlene Wittstock, muy conjuntados ya que ambos iban de blanco, ella en un tono crudo y él con pantalón negro. Esta es la primera ocasión en que la nadadora acude a una boda Real, de ahí la expectación ante su primera prueba de fuego frente a toda la realeza.
Una de las sorpresas ha sido ver a Kyril de Bulgaria entrando en la Catedral con Rosario Nadal, ya que llevan separados unos meses, aún así ambos han mantenido una distancia prudente entre ambos. La española no ha defraudado y se ha convertido en una de las más elegantes de la boda con un vestido azul de manga semi transparente y con un original escote corazón de plumas.