Tras varios jornadas de pequeños adelantos en redes sociales, que despertaban el insaciable apetito musical de sus seguidores, este miércoles Shakira ha lanzado Monotonía, una colaboración con el artista puertorriqueño Ozuna, el segundo sencillo de su próximo álbum tras la publicación de Te felicito, la popular canción que hizo con Rauw Alejandro. Alrededor del single se generaron grandes expectativas: muchos sospechaban que estaría repleto de 'recados' a Gerard Piqué. «No fue culpa tuya, ni tampoco mía, fue culpa de la monotonía. Nunca dije nada, pero me dolía, yo sabía que esto pasaría», eran los primeros versos que cantaba la artista colombiana en el adelanto de la canción. No hay mal que por bien no venga y es que, su mediática ruptura, ha creado un caldo de cultivo ideal para que que su nuevo álbum sea todo un éxito
Y, en este caso, el presentimiento de los fans no falló, o eso parece al escuchar la canción. Shakira hace referencia a algunos de los motivos que motivaron el fin su relación con el futbolista del Barça. «De repente ya no eras el mismo, me dejaste por tu narcisismo, te olvidaste de lo que un día fuimos», o «Tú en lo tuyo y haciendo lo mismo, siempre buscando protagonismo», son algunas de las frases que parecen ir dirigidas directamente a Piqué, con quien ha compartido doce años de su vida y tiene dos hijos en común.
En la letra, la cantante sostiene que ella aportó más en su relación: «Tú, distante con tu actitud, pero me llenas de inquietud. Tú no dabas ni la mitad, pero sí sé que di más que tú», entona Shakira, que más adelante añade. «No me saben a nada tus labios, ahora es todo lo contrario». A pesar de todo, y como es natural, parece que la colombiana tiene sentimientos encontrados: «Este amor no ha muerto», aunque luego añade que está «delirando. Te lo digo con sinceridad, mejor que esto se acabe ya. Que yo te quiero, pero yo me quiero más a mí», concluye la artista.
Su proceso de separación ha sido tan mediático como sus carreras profesionales y ahora están en juego la repartición de bienes y la custodia de sus hijos. No son buenos momento para el futbolista, que no pasa por su mejor momento deportivo, pero peores son para Shakira, que tiene otro frente abierto con Hacienda. La Fiscalía acusó a Shakira por cometer seis delitos contra la Hacienda pública por eludir impuestos entre 2012 y 2014. El ministerio público concluyó que la artista defraudó 14,5 millones de euros esos años al evitar el pago del IRPF y del impuesto sobre el patrimonio, cantidad más intereses que ya ha reintegrado. La Fiscalía le pide en total ocho años y dos meses de cárcel y una multa de 23,8 millones de euros.