Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz se convirtieron en padres de su primera hija el 14 de julio. Haciendo partícipes a todos sus seguidores del proceso, la madrileña ha querido contar cómo ha vivido cada momento del embarazo. Desde el principio hasta el posparto, los usuarios han sido testigos de su evolución, lo que ha ocasionado algunas polémicas. Tres semanas después, la presentadora de televisión ha compartido en sus redes sociales imágenes en bikini. «Aquí no hay suerte ni milagros, hay mucha preparación antes y durante el embarazo. Vida saludable, deporte, comida sana y meditación», escribía en el pie de foto.
En X (antes conocido como Twitter), algunos lectores añadieron que es importante tener en cuenta que «el físico depende de esos factores pero hay otros muy importantes como la genética, el nivel de renta, la educación o la clase social, y otros prerrequisitos no tan evidentes como acceso a sanidad, la paz, recursos alimenticios, vivienda y un ecosistema estable». Una lluvia de críticas en los comentarios han hecho que la presentadora responda: «Es agotador tener que explicar cada cosa que hago, y tener que recibir todo este odio siempre.»
Pedroche considera que «la información es poder». Por ello, ha justificado su decisión de compartir la evolución de su cuerpo manteniendo en privado detalles sobre la menor. En una historia de Instagram añadía que «tendrá que ser ella cuando sea mayor la que decida si quiere que se la conozca o no». En el comunicado, reflexionaba sobre las opiniones que recibió: «esta es solo mi cuenta personal y mi propia experiencia. Todo los pospartos son reales y no me considero mejor madre que nadie». A su vez, se muestra agradecida con la gente que le apoya y da cariño, y remarca que es la mayoría. Finalmente, se despide «tengo que protegerme y cuidar mi salud mental, y no solo por mí, por mi hija. Necesito estar bien para ella».