El colaborador televisivo Kiko Matamoros ha revelado este lunes en Sálvame que Makoke, su exmujer, le ha denunciado «por amenazas» por unas declaraciones que hizo en el programa, donde aseguró que dispone de dos horas de grabaciones.
El tertuliano recibió el pasado 6 de marzo una llamada de comisaría en la que le comunicaban que tenían una demanda «por amenazas», por lo que se trasladó hasta allí junto a su abogado, quien le transmitió un mensaje de optimismo.
«Se hicieron las diligencias pertinentes y a la vista de la denuncia el Jefe Superior de Policía de Madrid dijo que se me pusiera en libertad», ha explicado al respecto en el espacio de Mediaset.
Allí se nombró una vista rápida para el día siguiente que no pudo ser y, ahora, la pareja de Marta López Álamo está a la prueba de que la Fiscalía, que ha solicitado una serie de pruebas, determine si hay juicio o si se archiva.
«Yo no amenazo a nadie. El que ha sido amenazado reiteradamente en televisión he sido yo», ha opinado Matamoros, visiblemente enfadado, tras ser preguntado por sus compañeros.
«El hecho de que no se haya dictado ninguna medida ni orden de alejamiento ni nada cautelar me tranquiliza mucho», ha apuntado. «Me indigna mucho que se utilicen determinadas cosas y medios para cobrarse una venganza personal, no es una excepción aunque no es la regla», ha añadido.
«Pensaban que yo iba a estar ingresado en un calabozo dos días hasta que saliera el juicio pero no ha sido así», ha expresado el tertuliano, subrayando que la autoridad consideró que era una medida innecesaria a la vista de lo sucedido.
«Se me califica como una amenaza grave porque he practicado boxeo y porque una vez conté en público que había sufrido un brote psicótico. Me parece todo tan sucio pero no voy a seguir», ha zanjado.