El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha subrayado este martes que el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo es «fundamental» y ha cuestionado que el Tribunal Supremo pueda anular la sentencia sobre la que se sustenta, en aras tanto de la «justicia básica» como de la «estabilidad» legal.
Un borrador del fallo, publicado el lunes por el portal de noticias Politico, anticipa que las posiciones conservadoras se impondrán en el Supremo para anular el histórico fallo de 'Roe versus Wade', que reconoció en 1973 el derecho de las mujeres al aborto sin restricciones durante el primer trimestre del embarazo.
A la espera de saber «si este borrador es auténtico», Biden se ha adelantado para dejar claro de nuevo su defensa de la actual jurisprudencia, que entronca con la Décimo Cuarta Enmienda sobre libertad personal y la no injerencia de la Administración en decisiones personales. «Creo que el derecho a elegir de una mujer es fundamental», ha dicho el mandatario, bajo cuyas directrices la actual Administración ya venía preparando «opciones» con las que frenar lo que, en su opinión, es un «ataque continuo» de sectores conservadores.
Varios estados controlados por los republicanos ya han promovido leyes más restrictivas. «Estaremos listos cuando se dicte sentencia» en el Supremo, ha adelantado Biden, partidario de que, si el Alto Tribunal tumba la anterior sentencia, sean los congresistas quienes protejan los derechos de las mujeres. En los baluartes demócratas de Nueva York y California ya se preparan para llevar a cabo una dura batalla legal contra los planteamientos más conservadores.
Así, y con las elecciones parlamentarias de noviembre ya en el horizonte, cree que es momento que haya tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes una mayoría a favor de aprobar una ley que dé el aval legal definitivo a la sentencia 'Roe versus Wade'. Biden se ha sumado de esta manera a una serie de críticas que ya habían expresado en las últimas horas otros dirigentes demócratas y que, a pie de calle, ha motivado también protestas ante la sede del Tribunal Supremo.