El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido el reconocimiento de Palestina como Estado este miércoles durante una cumbre virtual de líderes del G20, en la que también ha abogado por abordar «de forma urgente» la emergencia climática y por fortalecer el sistema financiero internacional. Durante la reunión, en la que ha participado el presidente ruso, Vladímir Putin, por primera vez desde el estallido del conflicto en Ucrania, Sánchez ha condenado «enérgicamente la guerra de agresión de Rusia» contra ese país, según ha informado La Moncloa en una nota de prensa. Además, ha defendido una paz «justa y duradera», basada en la Carta de las Naciones Unidas y en los principios de «soberanía e integridad territorial», y ha pedido seguir apoyando a Ucrania.
Asimismo, ha condenado los ataques terroristas de Hamás contra Israel y ha insistido en poner fin a la crisis humanitaria en Gaza, al tiempo que ha defendido la solución de dos Estados y ha reiterado la propuesta de una conferencia internacional de paz «lo antes posible». Sánchez también ha instado a abordar «de forma urgente» la emergencia climática, de forma que en la próxima conferencia del clima en Dubái se acuerde alcanzar el máximo de emisiones globales previstas para 2025 y reducirlas en un 43 % para 2030 mediante energías renovables. Por otro lado, ha respaldado «el fortalecimiento y la mejora del sistema financiero internacional» y ha defendido la necesidad de cumplir los compromisos de la Declaración de Nueva Dehli, ciudad anfitriona de la 18 cumbre del G20 el pasado mes de septiembre.
En la reunión virtual de líderes del G20 de este miércoles han participado también la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres; el primer ministro indio, Narendra Modi; el presidente de Brasil, Luiz Inácio da Silva; su homólogo francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, entre otros. Pero se han ausentado el presidente estadounidense, Joe Biden, y el presidente chino, Xi Jinping, a quien ha sustituido el primer ministro chino, Li Qiang.
BURNEDiría que si. Y incluso si no le aplicáramos la palabra genocidio la alternativa sería exterminio, por no hablar de los desplazamientos forzosos, el hecho que (en Gaza) son sometidos a la autoridad de Israel pero no tienen derechos de voto sus ciudadanos, las detenciones por "sospechas", el hecho de que los han encerrado físicamente con un muro dentro de Gaza, y un largo etcétera. Efectivamente más que recordarme al genocidio (que evoca más a los nazis), la situación en la que tienen a los ciudadanos de Gaza me recuerda al apartheid sudafricano. No hablamos, en ambos casos, de momentos históricos que den mucha confianza en la humanidad de los supuestos seres humanos.