La Caixa ha decidido "bancarizar" su negocio traspasando su actividad a su filial cotizada Criteria, que pasará a denominarse Caixabank y que estará controlada en un 81,1 por ciento por la primera caja catalana.
Según el acuerdo publicado ayer, el 18,9 por ciento restante de Caixabank quedará en manos de los actuales accionistas minoritarios de Criteria, que con este cambio se convierte en uno de los principales grupos bancarios de España y en el número 10 de la Eurozona.
La operación, que se espera que esté culminada en agosto de 2011, se instrumentará a través de un intercambio de activos, de manera que Criteria traspasará a La Caixa la mayoría de sus participaciones industriales (valoradas en 7.471 millones) y se quedará a cambio las oficinas, la plantilla de La Caixa y el negocio bancario de la entidad de ahorro, tal y como permite la nueva ley de cajas. Además, para compensar a La Caixa por el mayor valor del negocio bancario traspasado (9.480 millones), Criteria deberá dar a la entidad acciones por un importe de 2.009 millones de euros, que saldrán de una nueva ampliación de capital.
No obstante, pese al acuerdo de traspaso de participaciones, habrá excepciones ya que Criteria mantendrá el 5 por ciento de Telefónica y el 13 por ciento de Repsol.
Las participaciones en ambas empresas cotizadas son consideradas activos susceptibles de venta.