El gasto público en educación en Baleares alcanzó en 2016 los 5.484 euros, ligeramente por encima de los 5.335 euros de media nacional, según los resultados de la monografía 'Diferencias educativas regionales 2000-2016. Condicionantes y resultados', de la Fundación BBVA y el Ivie.
Entre comunidades autónomas se han registrado diferencias de 2.824 euros anuales por alumno, puesto que el País Vasco es la que tiene mayor presupuesto, 7.320 euros por alumno en 2016, un 63 por ciento más que Madrid, la autonomía que menos gasta, 4.496 euros
«Estas dos comunidades son dos ejemplos de cómo las posiciones sobre cómo estructurar el sistema educativo y asignar los recursos públicos pueden ser muy diferentes», ha explicado durante la presentación el catedrático y director de investigación del Ivie Francisco Pérez.
El experto ha puesto de manifiesto que en el caso del País Vasco el modelo «tiene que ver con una determinada tradición», así como con «elecciones» realizadas por los distintos gobiernos de la región.
«Es una comunidad con abundantes recursos públicos que opta por financiar abundantemente tanto la oferta pública como la privada», ha indicado Pérez, que ha añadido que «un porcentaje muy importante de los alumnos se forma en centros privados-concertados».
Respecto a la Comunidad de Madrid, el catedrático ha hecho hincapié en la diferencia que existe en relación con el volumen de recursos, y ha añadido que hay un denominador común con el País Vasco, en el sentido de que «hace una apuesta por la enseñanza concertada, por que los fondos públicos vayan a financiar los conciertos». No obstante, ha recalcado que hay un porcentaje de enseñanza privada no concertada «mucho mayor» que en el País Vasco.
Así, el estudio revela que en todas las CC.AA. la educación en centros públicos es mayoritaria, pero existen diferencias respecto a los privados. Por ejemplo, en País Vasco y Madrid los alumnos de la enseñanza privada superaban el 40% en el curso 2016/2017, mientras que en Extremadura, Castilla-La Mancha, Canarias, Andalucía, Galicia y Asturias no alcanzaban el 25%. La media de España estaba en el 30%.
El gasto de los hogares
También se aprecian diferencias en el gasto de los hogares. En este caso, la Comunidad de Madrid es la región con mayor gasto por alumno para el promedio de los años 2016 y 2017 (1.640 euros), un 57% más que la media nacional, y Navarra es la región en la que las familias más esfuerzo realizaron, ya que la educación representa el 4,5% de su gasto total.
En cambio, en Castilla-La Mancha los hogares gastaron 592 euros en educación por alumno de media en el citado periodo, un 43% menos que la media nacional, lo que supone un 2,3% de su gasto.
En relación con el gasto en el conjunto de España, el informe pone de relieve que creció un 40% entre 2000 a 2009, para después experimentar un descenso del 14% hasta 2014. En los últimos años el gasto público ha frenado su caída, mostrando un crecimiento acumulado del 1,7% entre 2014 y 2016.
Los autores de este estudio han constatado que el gasto público por estudiante de algunas regiones es impulsado al alza por la «mayor intensidad de la demanda de servicios educativos no obligatorios, el mayor nivel de renta de sus hogares, los mayores ingresos de su administración autonómica o la mayor asignación de recursos públicos a esta función».
Por el contrario, este gasto público puede verse reducido cuanto menores son los recursos de la comunidad autónoma, mayor el peso de los conciertos educativos y de la educación privada no concertada, y cuanto más se concentra el alumnado en núcleos de población grandes que permiten aprovechar economías de escala en los centros educativos.
Otra de las conclusiones a las que llegan los autores de este informe es que el peso de la educación privada no subvencionada y la amplitud de los conciertos «determinan la amplia heterogeneidad regional de las estructuras de financiación de la enseñanza privada».
En Extremadura el peso de la educación privada es minoritario, pero la administración pública financia casi el 80% del gasto de estos centros, y en Cantabria supera el 70%, mientras que en Madrid, Navarra y Canarias no llega al 40%. En estas tres regiones, y en La Rioja, Cataluña y Aragón, la financiación de la educación privada corresponde mayoritariamente a los hogares, mientras que en el resto es más pública que privada.
Recursos y resultados
Los resultados de este estudio señalan que Aragón, Castilla y León, Galicia y Asturias, cuentan con menores recursos que Cataluña, Madrid y Navarra, pero se sitúan junto a estas regiones en el grupo de las que tienen mejores resultados educativos. En cambio, la comunidad autónoma del País Vasco cuenta con el mayor presupuesto en educación, pero desciende al grupo de comunidades con niveles medios de resultados.
Por otro lado, el estudio aborda los llamados entornos favorables para la educación, que se caracterizan por «un nivel de formación alto, una ocupación cualificada de los padres y unos hogares con abundancia de recursos materiales con potencial educativo (libros, ordenadores, conexión a internet)». Los entornos desfavorables padecen carencias en estos ámbitos.
Según el informe, en Andalucía, el 50% de centros se encuentra en entornos educativos desfavorables, mientras que este porcentaje no supera el 10% en Aragón, Cantabria, La Rioja, Navarra, País Vasco, Baleares, Madrid, Galicia y Castilla y León. Además, los entornos favorables benefician en Madrid al 46% de los centros y en el País Vasco al 33%.
Asimismo, los estudiantes de entornos desfavorables son formados por lo general en centros públicos, especialmente en Andalucía, Canarias, Extremadura, Murcia y Castilla-La Mancha, mientras que su peso es mucho menor en los centros privados.
En cambio, el 65% de los centros privados se ubica en entornos favorables, en especial en Castilla-La Mancha (77%), Navarra (75%), Cataluña (74%) y Madrid (72%), una circunstancia que impulsa el mejor rendimiento educativo de sus alumnos, según recuerdan los autores.
Para los autores de esta investigación, el gasto público y privado en educación tiene influencia en los resultados educativos del alumnado, sin embargo, un simple incremento no garantiza mejoras relevantes en el rendimiento. «Es más importante gastar mejor que gastar más», ha concluido Francisco Pérez.
El trabajo, dirigido por el catedrático y director de investigación del Ivie Francisco Pérez, y los también catedráticos e investigadores del Ivie, Lorenzo Serrano y Ezequiel Uriel, analiza las diferencias y singularidades en el acceso a la educación, los recursos utilizados y los resultados educativos obtenidos en cada región.