La Guardia Civil ha iniciado una investigación para esclarecer la aparición, este jueves por la mañana, de un niño de cuatro años muerto en su domicilio en Magaluf. El menor, de nacionalidad española, ha aparecido sin vida en el interior de una secadora.
Fuentes del Instituto Armado han explicado que los hechos han ocurrido al mediodía en una vivienda de la avenida s'Olivera. Según las primeras hipótesis, el niño, que solía jugar al escondite en el inmueble, se ha escondido en la secadora y se ha quedado encerrado. No sería la primera vez que se ocultaba allí y anteriormente sus familiares ya le habrían reñido por hacerlo.
El menor fallecido, aseguran también fuentes policiales, se encontraba bajo la tutela de su abuela y de su tía. Al parecer, la abuela había salido de la vivienda y la tía se habría quedado dormida. Cuando la abuela del niño, sobre las 14.00 horas, ha regresado a la casa y no ha encontrado al menor, ha despertado a la otra familiar y directamente se han dirigido a la secadora. Allí han hallado al pequeño asfixiado en el interior del electrodoméstico.