El portavoz del grupo parlamentario Unidas Podemos (UP), Enrique Santiago, ha trasladado al Congreso el veto al acto en la fortaleza de La Mola que impulsa la CGT, para homenajear la figura de Salvador Seguí i Rubinat (1886-1923), conocido como ‘El Noi del Sucre', asesinado en Barcelona. El socio de gobierno del PSOE lo ha hecho este miércoles, registrando unas preguntas para respuesta escrita.
UP interpela al Gobierno por los motivos por los que «en unas instalaciones donde se pueden hacer bodas, bautizos y comuniones, no se puede celebrar un acto para recordar la figura de Salvador Seguí»; y plantea al Ejecutivo si piensa «dar las instrucciones oportunas para autorizar dicho acto».
Santiago recuerda la relevancia de Seguí y lo «no forzado» que es organizar este acto en La Mola, donde estuvo preso dos años una persona que «influyó de manera decisiva en la segunda ola del movimiento anarquista en Menorca».
La cuestión llega a la cámara baja después de que Podem Illes Balears denunciara el caso y de que Esquerra de Menorca lo transmitiera también a Santiago.
Recurso ante el ministerio
La Confederación General del Trabajo (CGT) a nivel estatal presentará, el lunes, un recurso administrativo ante la subsecretaría de Estado del Ministerio de Presidencia, competente en materia de la Ley de Memoria Democrática, para que reconsidere el veto a un acto previsto para el 15 de abril. Si el Gobierno se mantiene, la CGT irá «hasta el final», con «una demanda en los tribunales por vulneración de derechos reconocidos en la Ley de Memoria Democrática». Así lo aseguraba ayer Joan Piñana, miembro de la comisión de Memoria Histórica de la CGT nacional, una vez el jueves, la agrupación sindical en Menorca recibió una segunda negativa a su solicitud. La remitió el comandante general de Balears, Fernando Luis Gracia Herréiz, profundizando, expresaba, en los motivos para la denegación.
En su misiva, Gracia Herréiz recuerda «los criterios de uso en los que se sustenta la cesión demanial» de La Mola por parte del Ministerio de Defensa al Consorcio del Museo Militar, y que esto «no supone en ningún caso que tales espacios pierdan su carácter de instalación militar».
«El Consorcio es sensible» y está «dispuesto a hacerse eco de la cultura y a abordar la organización de foros en los que se profundice en el estudio y conocimiento y se debata desde una perspectiva histórica sobre figuras, eventos y épocas», asegura el comandante general, añadiendo que «no parece ser este el enfoque del evento». Así, menciona el «escrupuloso respeto de la neutralidad política», que «no es compatible» con «la autorización en instalaciones militares de actos con evidentes connotaciones políticas». Por eso, no sería razonable, «que ninguna de ellas pudiera sentirse ideológicamente discriminada toda vez que la propia ideología política no se contempla, por ley, como criterio en el funcionamiento de las Fuerzas Armadas».
Piñana admitía ayer su asombro por una «negativa que no puede tener mucho recorrido, al vulnerar dos aspectos de la Ley 20/2022». Primero, «la libertad de reunión y de expresión, para hacer un acto público de carácter social y cultural», teniendo en cuenta el «legítimo derecho democrático de recuperar el pasado y las figuras del sindicalismo, ahora que se cumplen cien años del asesinato de Seguí». Y luego, porque la ley se refiere al «uso del patrimonio histórico para informar del pasado reciente y la represión».
El apunte
«El homenaje a Salvador Seguí se hará, dentro o a las puertas de La Mola»
Mientras no se resuelve la situación, los organizadores mantienen que «el acto se va a celebrar, ya sea dentro, o a las puertas de La Mola, porque Salvador Seguí fue asesinado por el Sindicato Libre y fue una figura pública relevante, referente del movimiento libertario en Menorca». Esta afirmación, apunta Joan Piñana, «queda reconocida por el propio Consorcio Militar con la reseña que hace de Seguí en su página web».