La doctora Nadiya Popel está suspendida de funciones de manera provisional en el Hospital Mateu Orfila, después de ejercer como médico de urgencias durante más de 18 años. La medida, efectiva desde el viernes, está vinculada a la decisión del Colegio de Médicos de Balears (Comib) de expulsarla provisionalmente de la institución «por infringir de manera reiterada el Código de Deontología Médica».
La expulsión provisional del Comib implica la pérdida de condición de colegiado y, por ende, la prohibición absoluta del ejercicio de la Medicina. Es por este motivo que el gerente del Área de Salud de Menorca, Bernardo Pax, le comunicó el viernes por escrito a la doctora Popel que no reunía el requisito imprescindible para ejercer como médico y que quedaba provisionalmente suspendida de funciones en el Hospital Mateu Orfila.
Desde que estalló la pandemia de la covid, la facultativa ha acaparado todos los focos por posicionarse contra las vacunas, publicitar tratamientos alternativos y recomendar productos sin aval científico. Según consta en el dictamen de la Comisión de Ética y Deontología del Comib, la doctora Nadiya Popel «pone en riesgo la seguridad de los pacientes» y su «reiterado comportamiento no es acorde a los valores éticos y deontológicos de la profesión médica».
Se trata de un caso excepcional. No hay precedentes en toda la comunidad autónoma. Aunque eso sí, de momento, la expulsión del Comib y la suspensión de funciones son provisionales. Pueden convertirse en definitivas una vez se hayan atendido las alegaciones de la doctora Popel (si las presentara) y las conclusiones de la Junta de Gobierno del Comib.
Pepe LuisLo que tu quieras y lo que tu digas pero lejos de la Sanidad pública. Mientras aparten a esta señora toda la razón es vuestra.