El Consell ha confiado el informe para poder mantener el puente de Rafal Rubí al expresidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) de España, Jordi Tresserras Juan. Es el mismo técnico, fundador del comité científico de Icomos, que evaluó la candidatura de la Menorca Talayótica.
Jordi Tresserras (Barcelona, 1967) ha recibido el encargo de realizar el estudio de evaluación de impacto patrimonial que justifique que el enlace a doble nivel a la altura del cruce de Rafal Rubí puede ser compatible con el entorno de las navetas prehistóricas incluidas en la declaración de Patrimonio Mundial de la Unesco.
El informe que Icomos realizó bajo la supervisión de Tresserras ya advirtió que las «obras viales inconclusas» en este tramo de carretera entre Maó y Alaior «están afectando al paisaje de las navetas de Rafal Rubí», causando «un impacto negativo en las vistas del paisaje». Un impacto sobre «el único lugar donde se ubican dos navetas funerarias» que, remarcaba el informe, el anterior gobierno insular pretendía «mitigar» eliminando las obras, es decir, derribando el puente a medio construir.
Pero el actual gobierno del PP en el Consell ha dado marcha atrás a la tramitación que seguía la izquierda para su demolición y ha encargado este informe obligatorio para poder terminar el puente, que el presidente Adolfo Vilafranca ve «necesario para la seguridad viaria»de la carretera.
Varias partes implicadas
Jordi Tresserras valorará en su estudio la postura que mantienen al respecto todas las partes implicadas, desde Icomos España e Icomos Internacional a la Unesco y el Ministerio de Cultura, así como la propia comunidad de Menorca.
De hecho, la resolución favorable con recomendaciones de Icomos a la candidatura de la Menorca Talayótica, que le permitió ser declarada en septiembre Patrimonio Mundial, compromete al Consell a presentar antes del próximo 1 de diciembre un informe a Icomos que explique cómo está implementando estas propuestas.
Este trámite retrasará la ejecución de las obras pendientes en el tramo de Rafal Rubí, entre los kilómetros 5‘6 y 7'7 de la carretera general, en el que el Consell ha previsto invertir 4'1 millones.
«Vamos a ir paso a paso», dice el conseller de Movilidad, Juan Manuel Delgado, «centrado ahora» en acometer la mejora del tramo comprendido entre la rotonda del aeropuerto hasta pasado el cruce de Talatí, convertido este mes de marzo en un punto negro que ha registrado un accidente mortal. El proyecto entrará este mismo mes en el Consell, que podrá ya licitar y ejecutar las obras previstas. El presupuesto de este año, que el actual gobierno insular aún no ha logrado aprobar, prevé destinar 6 millones a la obra.
A la espera de desbloquear la situación política, el presidente Vilafranca ha pedido 66 millones de euros al Ministerio de Transportes para poder financiar todas las actuaciones pendientes en la carretera general. «Para nosotros -resalta el conseller Delgado- es una prioridad».