El GOB Menorca ha denunciado este martes que los expedientes sancionadores en materia de pesca han caído «de manera espectacular» en la Isla desde el año 2019. Según los datos facilitados por el Consell al grupo ecologista, en 2023 se abrieron un total de 14 expedientes sancionadores, muy lejos de los 52 que se tramitaron en 2017 y de los 40 de 2018.
De los 14 expedientes que se tramitaron el año pasado, seis se refieren a pescadores recreativos de barca o de caña y dos a pesca submarina. Además, en otros seis expedientes estuvieron implicados pescadores profesionales, cuatro de los cuales relacionados con la comercialización.
De 140 a 4.000 euros
Los expedientes sancionadores que ejecuta el Consell responden a la actividad de distintos cuerpos de vigilancia. En concreto, seis de los expedientes del 2023 provienen de los inspectores de pesca del Consell, dos de los cuales han contado con la colaboración del agente de medio ambiente del Consell. Otros dos expedientes se abrieron a partir del trabajo de los guardapescas que trabajan en las reservas marinas y dos más corresponden a la Guardia Civil (Seprona). Los inspectores del Ministerio y las policías locales, con dos actas cada cuerpo, completan los expedientes abiertos.
En lo referente a la cuantía de la sanciones, desde el GOB señalan que la mayoría se quedó en un importe de 140 euros, después de la reducción por pronto pago, una cantidad que para el grupo ecologista es «poco desincentivadora», teniendo en cuenta que las sanciones fueron tipificadas como graves.
Desde el GOB también indican que solo dos sanciones fueron «ejemplificadoras», de 4.000 y 1.000 euros. Una de ellas se impuso a un barco de arrastre por pescar demasiado cerca de la costa de Son Bou y otra a un pescador submarino que operaba en el Parque Natural de s'Albufera des Grau.
A la vista de esta cifras, desde el GOB lamentan que «alguna cosa ha dejado de funcionar en Menorca desde hace cinco años en materia de pesca».