Más de mil personas han firmado ya una iniciativa en la plataforma Change.org para que no se instalen hamacas, sombrillas y otros servicios en la playa virgen de Binigaus, en el municipio de Es Migjorn Gran.
«No queremos que se mercantilice un espacio natural», se argumenta contra las intenciones del Ayuntamiento y se recuerda que Binigaus se halla ubicada en una Área de Especial Interés (ANEI) protegida a su vez como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
Además, los promotores de la recogida de firmas destacan que «la playa presenta una regresión constante, lo que agrava la reducción de la superficie de arena», y es apta para perros entre las 19 horas y las 9 de la mañana, por lo que «compatibilizar esta realidad con la hipotética ubicación de hamacas y sombrillas resulta difícil de imaginar».
Por eso se pide al Consistorio que «rectifique y priorice el respeto al entorno, la normativa y el ciudadano, en lugar de dejarse llevar por el afán recaudatorio», pues «hay cosas que no tienen precio».
A cambio de tener socorrista
El Ayuntamiento ha anunciado que plantea pedir a Costas el año que viene que le deje poner estos servicios en la playa si la Dirección General de Emergencias le obliga a dotarla de un servicio de socorrismo, como el que ya tienen las vecinas calas, urbanizadas, de Sant Tomàs y San Adeodato.
De hecho, el Consistorio ha pedido al Consell de Menorca que consorcie a nivel insular el servicio de salvamento, como así hace ya con la limpieza de playas o el control de la disciplina urbanística en rústico, para garantizar un mejor servicio con un menor coste para los municipios.
El efecto de los temporales en invierno ha dañado los arenales de las playas de Sant Tomàs y San Adeodato, lo que ha impedido poner todos los servicios previstos, provocando una reducción de los ingresos municipales superior a los 70.000 euros.