El arranque de la temporada de invierno ha vuelto a hacer saltar las costuras de la ruta de Obligación de Servicio Público (OSP) entre Menorca y Madrid. El colapso recurrente de la oferta de plazas en la conexión adjudicada a Iberia en régimen de exclusividad está haciendo que muchos días se cuelgue el cartel de completo, obligando a recurrir a onerosas escalas para conectar con la capital. Es una realidad redundante –hasta el ministro Óscar Puente reconoce que la programación es «insuficiente»– a la que la compañía aérea parece hacer oídos sordos.
Pese a contar con un respaldo de hasta 1,2 millones de euros de dinero público por periodo invernal para cubrir eventuales pérdidas, Iberia, que tiene total libertad para adaptar la oferta a la demanda, apura el mínimo exigido por el contrato de OSP, ahogando la creciente demanda en la ruta menorquina, a la que destina los aviones CRJ-1000 de cien asientos de su filial regional Air Nostrum en la mayor parte del invierno. Como norma general –refuerza con una frecuencia más Navidad y Sant Antoni– programa dos vuelos a la capital durante seis días a la semana, y tres frecuncias solo los lunes.
Mientras tanto, anuncia un incremento de plazas invernales en las rutas a la capital desde Mallorca y Eivissa, que no solo tendrán más frecuencias, sino que van a ser operadas durante toda la temporada baja por Iberia Express, su filial de bajo coste, que cuenta con aeronaves Airbus de entre 180 y 230 plazas. La programación entre Mallorca y Madrid es de hasta ocho vuelos diarios y la de Eivissa de entre tres y cuatro, una amplia oferta que llama la atención si se tiene en cuenta que los trayectos directos desde Menorca se están agotando este mes de noviembre con hasta diez días de antelación.
Al Senado
La semana pasada los problemas en la ruta de servicio público entre la Isla y Madrid, que trae de cabeza a agencias de viajes, residentes y visitantes habituales, llegó al Senado. Preguntado por el senador por Menorca, Cristóbal Marqués, que viene reclamando que todos los días haya tres frecuencias, el ministro de Transportes, Óscar Puente, recordaba que la OSP marca unas vuelos mínimos, pero que la compañía adjudcataria puede programar más si lo considera necesario.
También reconocía abiertamente que la oferta mínima exigida por la Obligación de Servicio Público es insuficiente, una afirmación que va en la línea de lo que denuncian usuarios y agencias de viajes desde hace tiempo, pero que sorprende viniendo del máximo responsable del contrato adjudicado con esas condiciones hace tan solo poco más de un año, en agosto de 2023, por un periodo de dos inviernos. Desde el Ministerio ya deben estar trabajando en la renovación de una adjudicación que expira en abril del año próximo. Habrá que ver qué oferta mínima de vuelos se exige viendo el comportamiento al alza de la demanda.
Más plazas en abril
Iberia Express, con una flota de aviones que doblan la capacidad de los de Air Nostrum, sí será la encargada de operar la ruta entre Menorca y Madrid en el mes de abril, el último comprendido en el periodo de Obligación de Servicio Público (OSP), ya terminado el invierno. La filial de Iberia por el momento tiene a la venta dos frecuencias diarias todos los días, incluidas los lunes, aunque desde sus servicios de comunicación aseguran que esa programación no está cerrada.
Iberia incrementa la capacidad de la OSP en un mes que el año que viene tendrá aroma de inicio temporada, al menos a juzgar por la amplia oferta de vuelos que se programan desde varios aeropuertos nacionales e internacionales. En los últimos años Ryanair ha mostrado en diversas ocasiones su intención de operar la ruta a Madrid desde finales de marzo, pero no puede hacerlo porque la OSP está adjudicada en régimen de monopolio a la UTE formada por Iberia, Air Nostrum e Iberia Express. Esta última también programa un vuelo diario adicional a la oferta invernal de Air Nostrum en las fechas punta de Navidad y el puente de Sant Antoni.
OSP = No competència = Monopolio = Hacemos lo que nos da la gana. Pero que limitados son los que creen en el intervencionismo. Eso sí, en temporada no vamos a caber