El tránsito de vehículos por la calle Cós de Sant Lluís seguirá sin cambios, con la reducción del horario peatonal que adoptó el equipo de gobierno del PP y Per Balears cuando cambió el gobierno municipal, en 2023. En ese momento el cierre al tráfico rodado se retrasó hasta las 18,30 horas en verano, y el PSOE intentó sin éxito, en el último pleno, volver a avanzar ese cierre a las 13,30 para «favorecer la vida social en el casco urbano», como reclamó en una moción que fue tumbada por PP y Per Balears, con el voto de calidad de la alcaldesa, Loles Tronch.
La decisión de la apertura de esta céntrica vía de Sant Lluís es «estrictamente política y cumple la legalidad vigente», afirmó el concejal de Policía y Movilidad, Jorge de Diego, representante de Per Balears. Era un compromiso electoral, recordó, «y venía muy claro en ambos programas, debe respetarse». En el mismo sentido, la alcaldesa del PP, Loles Tronch, aseguró que, pese a que se recogieron firmas para la pacificación de la calle, «también tuvimos numerosas firmas para abrirlo» y recordó que, cuando se celebran actividades lúdicas y festivas «el Cós, salvo error, se cierra», para que los residentes puedan disfrutarlas. De modo que emplazó a la oposición a «no hablar más del mismo tema» y a dirigirse al Consell, que es el titular de esta vía y por tanto, competente en cualquier cambio que se decida.
Los socialistas, además de ampliar el horario peatonal, ven necesario instalar más radares pedagógicos porque con uno al inicio de la calle creen que no se disuade lo suficiente a los conductores, que ganan velocidad a medida que avanzan por el Cós, «hay inseguridad», advirtió la concejal Silvia Pérez, quien también dudó de los beneficios de mantener la calle abierta para la actividad comercial.
Por su parte, Emma Navarro, concejala de Volem, manifestó que «lo ideal para nosotros sería peatonalizar totalmente la calle y abrir franjas horarias para la carga y descarga y también para los residentes». Los ediles de Volem apoyaron la propuesta socialista para al menos regresar al horario anterior, que finalmente no prosperó.
Cerrar el Cos (Me-8 Maó-St. Lluís-Alcaufar) para beneficio de los que allí residen, va en detrimento de las calles paralelas del casco urbano, todas ellas residenciales y no carretera como en el caso del Cos y de s’Avinguda. Estaría de acuerdo con el cierre del Cos si éste formara parte de un plan más amplio de pacificación del pueblo que incluyera D’Allemand, Lannion y Son Parruquet. Así y todo, se tendría que valorar, no sea cosa que se convierta en un espacio desordenado de circulación de todo tipo de vehículos (patinetes, bicicletas…) que ya circulan a toda velocidad, incluso contra dirección, ante la más absoluta pasividad de la policía local. Ni tampoco como zona de juegos, como ya ocurrió en el Cos con pelotazos a todas horas y canastas situadas en plena vía pública, que para esto existen diversos espacios habilitados (sa pista, zona deportiva o diversas y amplias plazas).