Los últimos análisis del agua de la red de Malbúger, la que depende de la desnitrificadora que se desconectó hace casi un año, siguen confirmando que se superan los niveles máximos de nitratos permitidos. Así lo indican los resultados que el Ayuntamiento ha colgado en su página web, correspondientes al mes de mayo.
Durante ese mes se tomaron tres muestras en la red de Malbúger —dos el día 13 y una el 22— y en todas ellas se superó el límite de 50 miligramos por litro de agua, umbral que marca la potabilidad. En una de las analíticas se alcanzó un nivel de 56,8 mg/l.
En mayo también se detectaron niveles superiores a los permitidos en la red del Turó, que abastece a la otra mitad de la ciudad. Aunque en este caso el exceso fue leve, los análisis reflejaron valores de 50,6 mg/l y 50,3 mg/l. Unos niveles similares se observaron también en las analíticas realizadas en Sant Climent, que registraron 50,7 mg/l. La red que presentó los peores registros, como viene siendo habitual, fue la de Es Grau/Cala Llonga, donde se llegó a los 63,2 mg/l.
Los resultados del mes de mayo de la analíticas del agua mantienen la tendencia de los meses anteriores: de las 28 analíticas realizadas desde enero en las distintas redes del municipio y publicadas en la web, en 23 se superaron los límites permitidos de nitratos, lo que representa el 82 por ciento del total.
Críticas de la oposición
A la vista de las últimas analíticas, desde el PP de Maó señalan que «los resultados son profundamente preocupantes», y recuerdan que «la superación de los límites recomendados y permitidos representa un riesgo evidente para la salud pública». «Esta situación no es nueva, y lo más grave es que seguimos sin ver medidas eficaces para garantizar agua de calidad a los vecinos», remarcan.
Por su parte, el concejal no adscrito, Xisco Cardona, expresó su indignación en las redes: «La última analítica del agua en Maó es demoledora. Todos los pozos deberían estar cerrados. Esto es inaceptable. La salud de los mahoneses se va a resentir», escribió en X.
Desde Ara Maó también se declaran «preocupados y decepcionados» por la situación, aunque insisten en la necesidad de priorizar las medidas frente al descenso del acuífero. «Si la población no entiende que el actual nivel de consumo de agua es insostenible, no habrá agua que desnitrificar», advierte Jordi Tutzó.
Lluis GimenezLo dice usted (y creo que lleva razón) : ".... paramos la inyección de agua de rechazo de San Clemente...". 🤗🤗🤗 Pero llegados a este punto.... ¡Todos callan!.