El proyecto para construir la tercera balsa de riego de Menorca está a punto de empezar a ejecutarse sin que se hayan resuelto los problemas que lastran las dos existentes, en Ciutadella y Es Mercadal, cuyos usuarios tienen que hacer complicados equilibrios para poder utilizar el agua que llega de las depuradoras con un exceso de nitratos que lastra el aprovechamiento de agua regenerada. Lo denuncia la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural, desde donde califican de «desbocado» el exceso de salinidad del agua que llega a las balsas.
El objetivo de su plan de viabilidad del campo, que pasa por un incremento de las necesidades hídricas para los cultivos de regadío, necesita aumentar la disponibilidad y uso de aguas regeneradas para abastecer los cultivos. El objetivo es que en un plazo de cinco años se pase a nivel autonómico de un porcentaje del 21,06 por ciento de aprovechamiento potencial de aguas regeneradas para el regadío al 30 por ciento. Para conseguirlo, no obstante, Agricultura asegura en primer lugar que es necesario que «la totalidad de las balsas actuales funcionen a pleno rendimiento».
En ese sentido, apunta especialmente a los casos de Ciutadella y Es Mercadal. Fuentes de la Conselleria dejan claro que «no funcionan bien» y llaman a las administraciones competentes, en este caso la Dirección General de Recursos Hídricos, a tomar todas las medidas a su alcance para terminar con los sucesivos problemas de intrusión de agua de mar en las redes de saneamiento, que llegan a las depuradoras, cuyo tratamiento no incluye la desalinización. También llaman a desarrollar actuaciones pendientes, como la balsa de Sant Lluís, y a una nueva planificación para caminar en el objetivo de que a largo plazo ese porcentaje de agua regenerada para regadíos alcance el 50 por ciento.
Vivimos en una isla rodeados, CREO que de agua salada y con unos vientos del Norte muy guays..... ¿ Le ponemos un toldito a la balsa?