Alrededor de medio millar de trabajadores conforman las plantillas de los recursos asistenciales para mayores en Menorca, repartidos en los distintos centros de día y geriátricos que hay en la Isla, sin contar que esa es la estructura básica y que cada día se necesitan refuerzos para cubrir sustituciones, en un sector en el que la elevada carga de trabajo se traduce en altas tasas de bajas por enfermedad. Se necesita más personal, las bolsas se agotan y algunos centros sufren un goteo de abandonos de auxiliares de enfermería, enfermeros y gerocultores, pero también de áreas como lavandería o cocina.
Los geriátricos y centros asistenciales se disputan estos perfiles. Los profesionales buscan mejores condiciones laborales, y en estos momentos las administraciones –Consell, ayuntamientos y Servicio balear de Salud–, rivalizan por captarlos.
«Nuestros salarios están estancados frente a los pluses que ganan las enfermeras, por ejemplo en el Ib-Salut», señala Marina Olivella, directora de la residencia geriátrica municipal de Ciutadella. Allí cuentan con una plantilla estructural de 69 personas pero lo cierto es que para cubrir bajas, vacaciones y sustituciones ahora mismo trabajan 90 personas.
Situación en Maó
En el último pleno del Ayuntamiento de Maó, a raíz de una pregunta del concejal no adscrito, Xisco Cardona, sobre los problemas de personal en el geriátrico municipal, el concejal de Atención a las Personas,Enric Mas, incidió en este problema de competencia interna. Mas pidió «a las administraciones competentes que apoyen a ayuntamientos y geriátricos y que las normas de juego sean las mismas y se equipare el personal sociosanitario al sanitario», ya que de lo contrario, advirtió, «lo que hacemos es que los servicios públicos nos estamos desmantelando entre nosotros».
En la Relación de Puestos de Trabajo del Ayuntamiento de Maó la residencia geriátrica cuenta con una plantilla de 75 plazas, de las que 36 son de auxiliares sociosanitarios y enfermería; de 36 se pasó a 54 auxiliares en mayo con 18 contrataciones extra incluidas en el programa de atención integral centrada en las personas, según explicó Mas.
Cinco auxiliares que trabajaban en el geriátrico municipal de Maó han renunciado recientemente a su plaza para ir a la residencia de Trepucó III para la atención a personas con discapacidad intelectual y problemas conductuales graves, dependiente del Consell.
«Nos tendríamos que preguntar por qué hay ese volumen de gente que huye a trabajar a otro sitio», inquirió el concejal no adscrito Xisco Cardona en el último pleno de Maó.
La respuesta es que buscan ganar más, pero también mejorar sus condiciones, «te quitan vacaciones y días de descanso, ahora mismo estoy sola en mi departamento», se lamenta una trabajadora del geriátrico municipal de Maó que prefiere permanecer en el anonimato, «no tienen conciencia del trabajo que hay», y añade que «muchos residentes se quedan encamados porque faltan auxiliares».
El Consell tiene una plantilla de 83 trabajadores en la residencia de mayores de Josep Anselm Clavé en Maó y de otros 85 en el centro sociosanitario de Santa Rita en Ciutadella. El nuevo recurso asistencial de Trepucó III tiene que completar una plantilla de 18 personas. La consellera de Bienestar Social, Carmen Reynés, no cree adecuado hablar de competencia entre centros, «yo no lo veo así», declara, «hay mucha oferta y el trabajador decide, por ejemplo, en el IB-Salut pueden tener una mayor promoción profesional».
Sinceramente, la excusa de la exigencia del catalán es eso, una excusa. Tenemos un hospital lleno de médicos extranjeros (la mayoría sudamericanos) que hablan 0 catalán. Así que, digan la realidad del problema que es el alto nivel de vida que estamos pagando los residentes en relación a los sueldos. Vivienda carísima (si la encuentras), productos de primera necesidad a precios gourmet, conectividad tercer mundista, sanidad que te exige desplazamientos y adelanto de pagos de tu bolsillo, etc... Qué funcionario va a quedarse aquí en estás condiciones por muy catalán que hable si en la Península su mismo sueldo le cunde más? Dejen de poner el idioma como excusa y afronten la realidad con sinceridad!