En las últimas semanas ha aumentado una nueva modalidad de fraude telefónico que pone en riesgo a muchos ciudadanos. Los estafadores llaman haciéndose pasar por agentes públicos y ofrecen un supuesto pago de 200 euros mensuales durante seis meses, un señuelo que esta generando gran preocupación y numerosas consultas en canales oficiales y plataformas de mensajería instantánea como WhatsApp.
Esta campaña fraudulenta ha sido confirmada como falsa por autoridades oficiales, que subrayan que ningún programa de ayudas real contempla el abono mencionado, ni se realizan llamadas proactivas para repartir dinero. Este tipo de engaño, conocido técnicamente como vishing, se basa en la suplantación de identidad y utiliza métodos cada vez más sofisticados para ganarse la confianza de la víctima y acceder a sus datos financieros.
Los delincuentes suelen usar la técnica llamada spoofing, que permite mostrar información falsa en la pantalla del teléfono móvil. En este caso, el identificador de la llamada muestra nombres similares a organismos públicos, como Iss Bono 200euros Ayuda Social, lo que provoca que muchas personas no duden de la autenticidad de la llamada.
Cómo funciona la estafa del falso bono
El procedimiento comienza con una llamada que pretende parecer legítima. Durante la conversación, el supuesto funcionario informa al usuario de que ha sido seleccionado para recibir una ayuda económica de 200 euros al mes durante seis meses.
Para recibir el pago, los estafadores solicitan datos bancarios, pero la parte más peligrosa ocurre poco después: envían un código numérico de seis dígitos mediante SMS al teléfono de la víctima y piden que se lo facilite. Este código no es para cobrar el dinero, sino para autorizar transacciones financieras a través de sistemas de doble autenticación (2FA).
Entregar ese número equivale a abrir la puerta directamente a la cuenta bancaria, permitiendo que los delincuentes realicen compras o transferencias sin el consentimiento real del titular.
Respuesta institucional y recomendaciones oficiales
Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se ha reiterado en 2025 que las Administraciones Públicas nunca llaman para ofrecer ayudas económicas no solicitadas, ni solicitan datos personales o bancarios por teléfono. La comunicación oficial se realiza a través de canales seguros, como notificaciones certificadas o a través de la Sede Electrónica.
El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ha recibido numerosos reportes mediante su servicio de atención 017 y clasifica esta técnica de fraude dentro del vishing, un método que combina el phishing tradicional con la llamada telefónica para engañar a las víctimas.
Los expertos aconsejan a los ciudadanos mantener una actitud crítica ante llamadas inesperadas que prometan dinero o prestaciones que no hayan sido solicitadas previamente. Nunca se debe facilitar información personal, datos de tarjetas bancarias ni códigos de verificación recibidos por SMS o correo electrónico.