La Associació d'Hortals de Menorca confía que la amnistía urbanística para legalizar construcciones ilegales en suelo rústico que planea el Govern, más los cambios que plantea el Consell en el PTI, «sean la oportunidad definitiva» para resolver la problemática de los hortals ilegales que «se ha prolongado y enquistado a lo largo de muchos años».
Conscientes que tendrán que hacer cesiones, como «modificaciones» en estos inmuebles que «estamos dispuestos a llevarlas a cabo» o el pago de alguna multa, «esperamos que nos pongan condiciones razonables y asumibles para hacerlo», esgrimen en una carta remitida a esta redacción.
Abogan por una solución «aceptable para todos», a la vez que reclaman «una atención individual para cada caso, ya que ninguno es igual». Asimismo, piden que no solo afecte a los núcleos de ‘hortals', sino también a las edificaciones en rústico fuera de estas zonas, que «son tanto a más que los que sí están», ya que «tener una casita rústica sencilla pero decente no es ningún pecado».
Los propietarios de ‘hortals' califican la actual situación de «insostenible», y recuerdan que las multas «extremadamente abusivas» que se imponen en suelo rústico «no solucionan nada». Admiten que se «ha abusado construyendo», pero apuntan a que la culpa ha sido de la administración que «no ha sabido fijar pautas y límites», que ha hecho que con «el no a todo se diera pie a que cada uno hiciera lo que consideraba para cubrir sus necesidades». Argumentan que «si se hubieran puesto unos límites», ahora «no veríamos familias arruinadas y destrozadas por las abusivas e inasumibles multas que no sirven para nada más que recaudar», y que si se hubieran hecho las cosas bien «las casitas de los ‘hortals' serían más uniformes y sencillas, con tejas rojas y persianas verdes al estilo menorquín de siempre».