La doctora Nadiya Popel revela en una carta, que la gerencia del Hospital Mateu Orfila impidió que ella pudiera visitar a una paciente amiga suya mientras esta se encontraba ingresada en una habitación de planta la pasada semana.
Se trata de la misma mujer que tuvo que pasar dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario cuando estaba siguiendo un tratamiento de ozonoterapia que le aplicaba la doctora ucraniano-española, una terapia alternativa oxidativa para combatir infecciones, bacterias y hongos, principalmente. Popel está actualmente expulsada del Colegio de Médicos de Balears, aunque el caso está en manos de los tribunales dados los recursos presentados por su abogado.
- Lea aquí la carta de la doctora Nadiya Popel
En la misiva, Nadiya Popel se pregunta si todos los médicos y pacientes no son iguales, y si los hay que pueden recibir las visitas con normalidad y a otros a los que se les restringen por orden de la gerencia del Hospital. En este sentido, recuerda que el derecho a ser visitado o no en un hospital es del paciente y no de la gerencia.
Popel también se pregunta en la carta por qué se ha hecho público en prensa el ingreso de esta persona y las explicaciones que les dio a los sanitarios cuando precisó su ingreso, sin haber obtenido su consentimiento para hacerlo. Por eso apela a la falta de ética profesional exhibida por directivos y compañeros del centro hospitalario. «No se puede caer más bajo a nivel humano en el Hospital y no me sorprende que la gente no quiera ir ahí».
La doctora Popel tiene varias causas abiertas por demandas cruzadas contra la Conselleria de Salud y el Colegio de Médicos de Balears que tuvieron su origen durante la pandemia cuando se posicionó públicamente contra las vacunas del coronavirus.
Corre por la hemeroteca del presente medio un artículo de hace más de un año alertando del inexplicable aumento de mortalidad. A qué se debía tal publicación? Me dicen que los técnicos de asistencia sanitaria están muy ocupados últimamente, día sí, día también van haciendo salidas. Alguien sabe algo? No, claro, es más interesante continuar con el culebrón (político) de las "fechorías" de una Doctora que tuvo la valentía de adertir desde el principio, y hoy se desvive por compartir su conocimiento para paliar en lo posibe los efectos adversos de los tratamientos que tan seguros nos vendieron, por cierto, a gente que acude a ella conscientemente en busca de ayuda y consejo, según me consta. Claro, que ya podría dejar de complicarse la vida y hacer como otros en el MO, que viven mejor cobrando bonus de las farmaceuticas según sus portales de transparencia.