La concejal del Ayuntamiento de Ciutadella y responsable del departamento de Limpieza de la Vía Pública, Carla Gener, se defiende de las quejas que derivan de los residentes de varias de las zonas afectadas por la precariedad del servicio de recogida de basuras.
De inicio, Gener no se atreve a precisar el número de contenedores que se han retirado, pero matiza que «más que quitar contenedores, hemos quitado ubicaciones y los hemos reagrupado en otras».
La edil por Ciutadella alude directamente a las averías de los camiones como causa matriz del problema, fundamentalmente los de carga lateral, que es por donde mengua el servicio. «Nos llegaron otros dos camiones, pero de sistema fijo», sigue, en referencia a vehículos que, tras una ronda, deben inexorablemente acudir a descargar al vertedero de Milà, de ahí la decisión de ajustar el servicio de recogida que, por ende, tanto solivianta a los vecinos de las zonas afectadas.
En ese sentido, Gener entiende que el problema se agrava por culpa del «incivismo», de lo que es indicativo la gran cantidad de basura que se detecta en espacios donde no corresponde, ya sea «en plena calle o en zonas específicas de reciclaje», o como que alguien llenó de chatarra un contenedor «que no era para eso, e hizo que se estropeara otro camión, el único que teníamos en buen estado de carga lateral», evoca Gener, lo que «trastocó» más si cabe el servicio.
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Eso sí, la concejal considera que hasta ahora, «la cantidad de contenedores era excesiva», y que la gente «a veces se queja por quejarse», le «cuesta moverse un poco para tirar la basura».
Multas y cámaras en puntos conflictivos
Gener, que en cualquier caso comprende las críticas, pues la «situación no es agradable», pero evidencia la «necesidad» de garantizar el servicio de cara al verano, por otra parte admite «no creer» en la eficacia de las campañas para concienciar a la gente -se empieza una la semana próxima- y sí en un método más expeditivo; «multar» y tratar de poner cámaras en puntos conflictivos donde «retiramos la basura y a los dos minutos se llena».
Gener, por último, pone en valor la labor de los trabajadores del servicio de recogida, «que se dejan la piel» y a quiénes «la gente falta al respeto sin que tengan culpa de nada», y admite que la situación en general «es muy frustrante, pues lo que queremos es dar el mejor servicio posible».
Hasta aquíA los hoteles les obligan a guardar la basura en sus instalaciones hasta que el servicio municipal tenga a bien recoger la correspondiente fracción, para lo cual el hotelero se ve obligado a tener una gran cámara refrigerada para que su basura no genere insectos. Con lo cual deben gestionar su basura igual que el ciudadano de a pie. El problema es que uno esté de acuerdo o no con la imposición municipal de gestionar nuestros residuos mediante el puerta a puerta, porque hay alternativas que sería mejor acogidas, como los contenedores que abren con una tarjeta individualizada, habríamos de elegir el contenedor adecuado a la basura que fuéramos a tirar, y ya estaría solucionada la polémica... Pero es más fácil decir que se frustran nuestros políticos !!