En Ciutadella se ha reducido un 14 por ciento el volumen de sanciones impuestas por saltarse el semáforo con foto-radar de la Plaça de Ses Palmeres. Hasta finales de octubre se tramitaron 1.248 denuncias, es decir, una media de 4,2 diarias. Cifras a la baja, si se comparan con las 1.801 registradas durante 2024, a razón de 4,9 al día de media.
Aunque todavía faltan dos meses para cerrar el año —el dato ofrecido es hasta el 22 de octubre— y el número de sanciones incrementará en alguna medida, desde el Ayuntamiento de Ciutadella hacen una lectura positiva y consideran que es un reflejo de una mejora en el comportamiento cívico de los conductores, por lo menos en este punto de la ciudad.
Menos alegaciones
En 2024, los conductores recurrieron la sanción en quince casos, un dato que también se reduce por ahora este curso, con ocho alegaciones presentadas.
En esta cuestión tiene que ver el sistema implantado para simplificar y hacer más transparente la consulta de las pruebas en manos de la Policía Local en caso de denuncia. El conductor sancionado puede acceder a las imágenes y al vídeo de su vehículo a través de un código QR, el cual enlaza directamente con los archivos visuales. De este modo, los usuarios pueden verificar su validez sin necesidad de que se desplace a la Prefectura y, a la vez, agiliza el trámite y las comprobaciones a los agentes.
Todo esto coincide en el tiempo con la mejora de la señalización en este cruce, entre las dos vías más concurridas del centro urbano de Ciutadella.
Puestos a hacer algo para descongestionar el tráfico, podrían abrir los dos semáforos a la vez, el de enfrente del Molí y el del Casino Nou. No se entiende que el paso de los coches se haga en dos tandas si no se interfiere el sentido de ninguno. Y ya puestos a pedir, se podría adelantar la torre semáforica del camí de Maó hasta el paso de peatones que hay, tampoco se entiende esos 10 metros desde el semáforo hasta dicho paso.