Agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil tienen previsto descender a 40 metros de profundidad a una milla de Sa Mesquida, donde se encuentra la lancha que patroneaba el hombre español de 60 años, fallecido el pasado domingo en el mar.
La embarcación volcó y se hundió con 6 tripulantes y el patrón a bordo. Todos tuvieron que ser rescatados por el helicóptero de Salvamento Marítimo tras una larga espera en el agua y por otra lancha de la misma empresa a la que habían alquilado la embarcación. Para entonces el piloto ya había fallecido cuando fue izado por la aeronave.
Los guardias que desciendan hasta la lancha cuando las condiciones del mar mejoren revisarán el casco de la barca para evaluar si se produjo una vía de agua que hubiera podido causar el grave incidente.
La Policía Judicial de la Guardia Civil de Menorca sigue adelante con la investigación tras tomar declaración a los náufragos, entre ellos dos menores, integrantes de una familia suiza con segunda residencia en Maó, y a los titulares de la empresa náutica a los que ha requerido toda la información necesaria para establecer si cumplen la normativa vigente o hubieran podido incurrir en algún tipo de negligencia.