Los tres molinos del parque eólico de Milà se encuentran inoperativos desde el pasado 23 de agosto, una situación que se ha agravado por los problemas de la empresa que realiza el mantenimiento para encontrar recambios y mantener en el parque un reservorio de materiales que permita afrontar la reparaciones de manera rápida.
Desde el Consell, explican que las averías en el parque cada vez son más frecuentes y se deben a la obsolescencia de la maquinaria y a la fatiga de los materiales, que ya se hallan en la recta final de su vida operativa, una situación que dificulta en gran manera las labores de mantenimiento.
Además, desde el Consell señalan que el mes de agosto es un mes de baja disponibilidad de viento y en el cual los episodios de tormentas estivales provocan problemas de inestabilidad de la red eléctrica, causando averías en los sistemas de potencia de los aerogeneradores debido a las sobretensiones de origen atmosférico.
En estos momentos, los tres molinos están pendientes de la llegada de diversos componentes que se han enviado a talleres especializados de la Península para su reparación, y algunas de las piezas que se deben sustituir están encargadas desde el mes de abril y se espera que lleguen a la Isla en septiembre.
El conseller de Medio Ambiente, Simón Gornés, ha explicado que desde el Consell son conscientes de la obsolescencia de la instalación y, aunque ya se han encontrado las reparaciones ordenadas, valorarán si a partir de ahora es mejor dejar los molinos inoperativos y centrarse en su sustitución a partir de un proyecto ya redactado.
Fase final
El parque eólico de Milà entró en funcionamiento en 2004, convirtiéndose en el primer y único parque de estas características en Balears, una comunidad en la que hasta la fecha se han descartado el resto de proyectos de este tipo que se han planteado, por razones de rechazo social, impacto paisajístico o evaluación negativa de la Comisión Balear de Medio Ambiente.
De este modo, el parque de Milà cumplirá veinte años en activo en febrero de 2024, llegando al final de su vida útil con claros signos de haber quedado obsoleto, como queda patente por las cada vez más frecuentes averías que sufren los tres aerogeneradores que siguen activos. Esta situación, ha supuesto el descenso del volumen de la energía generada y también el aumento del coste de mantenimiento y reparación de la instalación.
El parque lo gestiona el Consorci de Residus i Energia de Menorca, y consta de tres aerogeneradores, con una potencia total de 2,4 MW, y aunque las previsiones eran de que se pudiera llegar a los 7.040 MWh/año, la realidad es que la media histórica es de 5.000 MWh anuales.
ENDESA es la clave. Ni molinillos de café que somos incapaces de mantener, ni mega parque solares que ocupan territorio y cuya viabilidad económica está claramente en duda si no se subvenciona. Entonces, qué nos queda? Respuesta sencilla ENDESA y la Central. Estos nunca fallan.