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El Consell ignora un estudio encargado por el tripartito que aconseja reducir el tráfico un 30%

El actual conseller considera que se trata de un «encargo político» y supedita cualquier limitación a la entrada de vehículos al techo de plazas turísticas que analiza Ordenación del Territorio

El estudio recomienda reducir la circulación en la carreteras de Menorca durante los meses de verano. | Josep Bagur Gomila

| Menorca |

El actual equipo de gobierno del Consell no da credibilidad a un estudio encargado por el anterior departamento de Movilidad de la institución a finales del pasado mandato para analizar la capacidad de carga de las carreteras de Menorca, que entre sus conclusiones recomienda reducir el tráfico en la Isla hasta un 30 por ciento durante los meses de verano.

Así lo ha reconocido el actual conseller de Movilidad, Juan Manuel Delgado, tras ser preguntado al respecto por el portavoz de Més per Menorca, Josep Juaneda. Delgado denuncia que el estudio se encargó «a nivel político, y sin la intervención de los técnicos del Consell», por lo que considera que «hay dudas sobre su validez objetiva y sobre la recepción técnica del mismo».

Delgado recuerda que el actual equipo de gobierno ha encargado, a través de la Conselleria de Ordenación del Territorio, liderada por Núria Torrent, un estudio de la capacidad de carga de la Isla al mismo equipo que redactó el PTI, a partir del cual se tomarán decisiones y se decidirá si se encarga un estudio específico sobre la capacidad de acogida de vehículos de la Isla.

Por su parte, Juaneda ha pedido al conseller que se usen los datos del estudio para empezar a dar pasos para limitar la entrada de vehículos en Menorca.

Reducción de coches en verano

El estudio encargado por el anterior equipo de gobierno del Consell establece la necesidad de reducir el tráfico rodado en la Isla durante los meses de verano. Concretamente, calcula que en el mes de junio sería necesaria una reducción del 17 por ciento, del 29 por ciento en junio, del 30 por ciento en agosto y del 19 por ciento en septiembre.

Para llegar a esta conclusión, los autores del estudio han analizado la cantidad de vehículos en circulación durante el 2022, a partir de las cifras de los aforos de tráfico existentes, y se ha comparado con la capacidad viaria de la Isla, calculada mediante la realización de un inventario de las carreteras existentes.

A partir de todos estos datos, se han estimado los niveles de servicio para las distintas carreteras y para cada uno de los meses del año, y se han comparado con las recomendaciones del Ministerio de Transportes y Movilidad.

En los tramos más conflictivos, como la carretera Me-1, la Me-8 entre Maó y Sant Lluís o la Me-24 entre Ciutadella y Cala Blanca, se obtiene un nivel de servicio E, que equivale a una circulación clasificada como «inestable», cuando el Ministerio señala que el nivel mínimo aceptable es el nivel de servicio D. Por ello, el estudio recomienda reducir el número de viajes en vehículo privado de junio a septiembre, para así mejorar la calidad de la circulación y cumplir con las recomendaciones oficiales para las carreteras convencionales de dos carriles.

El apunte

Según el estudio, las carreteras de la Isla no alcanzan la calidad recomendada en verano

En los estudios sobre el funcionamiento del tráfico en las carreteras, se define una escala de la calidad de la circulación, a partir de aspectos como la comodidad, la seguridad, la economía o la fluidez del tráfico. Para ello, se establecen un total de seis «niveles de servicio»: circulación fluida (nivel A), circulación estable a alta velocidad (nivel B), circulación estable (nivel C), circulación casi inestable (nivel D), circulación inestable (nivel E) y circulación forzada (nivel F).

Según las recomendaciones del Ministerio de Transportes y Movilidad, el nivel mínimo aceptable es el D, mientras que en los meses de verano en los tramos más conflictivos de algunas carreteras de Menorca, como la Me-1, la Me-8 o la Me-24, se obtiene el nivel de servicio E. Por ello, los autores del estudio han calculado el porcentaje de reducción del tráfico que sería necesario conseguir, durante el período de junio a septiembre, para no superar el mencionado nivel D, una cifra que en el mes de agosto llega al 30 por ciento. Si el objetivo fuera todavía más ambicioso y se quisiera alcanzar una circulación estable (nivel E), la reducción del número de desplazamientos todavía tendría que ser mayor.

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