El ferri «Ciudad de Granada» ha vuelto a pernoctar este fin de semana en el puerto de Maó, lo que ha llevado a la Federación de Asociaciones de Vecinos de Menorca a elevar una nueva queja formal ante la Autoridad Portuaria de Balers.
Tras constatar que el buque de Trasmed supera el nivel máximo de ruido permitido en horario nocturno, se ordenó a la naviera que realizara la espera entre la descarga de carga y pasaje del sábado y la salida del domingo en la bocana del puerto. Todo ello siempre que las condiciones meteorológicas lo permitieran.
En este caso, los vecinos sostienen en su instancia que «no existe ni causa de lluvia ni de viento fuerte que justifique que el buque no haya pernoctado en la bocana del puerto de Maó como se anunció».
Mientras ha durado la escala del fin de semana en Maó, el «Ciudad de Granada» ha permanecido amarrado con los motores en marcha, lo que ha provocado las consabidas quejas tanto por el ruido como por las vibraciones que sufren las viviendas ubicadas en el entorno portuario.
Los vecinos creen que Autoridad Portuaria muestra una «nula sensibilidad» para resolver este problema y piden que no se siga haciendo «caso omiso a los incumplimientos de la legislación vigente».
El ente público se ha escudado en respuestas precedentes en la servidumbre acústica que tiene el entorno portuario de Maó, si bien ha adjudicado los trabajos para la instalación de un sistema de cold ironing que permita desconectar los motores de los ferries en el Cós Nou. Esta actuación no incluye al petrolero «Tinerfe» que atraca en la Estación Naval.
Ho son cansadets, i dubt que siguin més de 10.