Los clientes de los negocios de restauración junto al poblado de pescadores de Binibèquer Vell disponen desde hace días de una cierta flexibilidad para poder visitar en horario restringido este lugar emblemático de la costa de Sant Lluís.
Aunque el oficial, en el que no se puede acceder al interior del poblado, acordado por los propietarios, va desde las 8 de la tarde a las 11 de la mañana, se está permitiendo el acceso hasta las 9 o 10 de la noche a aquellas personas que acuden a cenar a los establecimientos de su entorno. Algunos de los propios restauradores han solicitado esta flexibilidad para no perder clientes, por lo que el vigilante de seguridad les permite el acceso cuando le indican en qué local se encuentran.
La junta directiva de la asociación de propietarios no quiso confirmar ayer esta excepción.