Los radares de velocidad de Es Migjorn Gran, y en especial el situado en la urbanización de Sant Tomàs, salen del letargo invernal y disparan su actividad a partir de mayo: ya se han notificado casi seis mil infracciones, exactamente 5.740, entre enero y el pasado 6 de julio, según la verificación del Registro de Salida que realiza la oposición en dicho municipio.
El radar de Sant Tomàs, donde la señal que indica el límite de velocidad a 30 kilómetros por hora es «muy pequeña», indican los socialistas, es el que más conductores ‘caza’, entre turistas y veraneantes, si se compara con los situados en el pueblo; los residentes, conocedores ya de la existencia de los cinemómetros, levantan el pie del acelerador.
Esta actividad notificadora no incluye las alegaciones, que también se cuentan por miles, algunas recurriendo al vacío legal que genera el hecho de que la urbanización de Sant Tomàs era todavía privada cuando el radar se trasladó, en junio de 2024. La recepción por el Ayuntamiento fue aprobada por el pleno en enero de 2025 pero aún no se ha firmado. Algunos conductores estarían intentando evitar el pago de la multa con el argumento de que el Consistorio es incompetente, hasta que dicha recepción no sea efectiva, para sancionar en la zona.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha pagado a la empresa CGi, con la que externalizó el servicio de notificación de multas a partir de octubre de 2023, un importe total de casi 32.000 euros en nueve facturas contabilizadas por la oposición.
Más multas que en la 'general'
Con las 5.740 notificaciones de sanción emitidas entre enero y julio, sin contar los meses punta de la temporada, los radares de Es Migjorn Gran se erigen en los campeones de Balears. Según el último informe elaborado por Automovilistas Europeos Asociados (AEA), con los datos de la Dirección General de Tráfico sobre los radares que más sanciones generan en España, Balears solo tiene un radar entre los más ‘multones’ del país, y se encuentra en la autovía de Sant Antoni de Eivissa.
Ese cinemómetro contabilizó 39.202 denuncias en 2024 y es una excepción entre los radares de la DGT en las Islas, ya que otro muy arriba en el ranking, el de la autopista central mallorquina MA-13 registró 7.094 denuncias en todo el año 2024. El radar de la Me-1 en Es Mercadal contabilizó 2.346 y el de las proximidades del desvío a Son Bou, 542 denuncias. Con mucho mayor tráfico la Me-1 generó en total 2.888 sanciones en un año.
En cuanto a la recaudación, en el primer trimestre de 2025 el Ayuntamiento ha ingresado 64.228 euros por las multas, y ha pagado a Alumbrados Viarios, SA 37.893 euros.
Las claves
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Tramitadas 57.740 multas en casi dos años
Desde que se pusieron en marcha los radares, agosto de 2023, hasta el 6 de julio de este año, se han tramitado 57.740 sanciones. Son datos extraídos del Registro municipal, desde el que salen las notificaciones de las multas a los conductores. Una actividad notificadora que es elevada hasta bien entrado noviembre.
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Gasto en Correos
El coste de franqueo de cartas certificadas y avisos tramitados a los conductores, a través del servicio postal, es «disparatado», clama el grupo socialista. Hay facturas de miles de euros, dependiendo del periodo de facturación, algunas pasan de los 20.000, 30.000 e incluso de los 50.000 euros.
Solo es recaudatorio para las arcas del ayuntamiento y la empresa privada con ello no han dejado a circular a velocidad exagerada en la urbanización los que trabajan allí lo saben después del radar pisan el acelerador pasando entre 60 a 80 el radar multa a los que no son de aquí