La Conselleria del Mar y del Ciclo del Agua confirmó ayer que se hará caso a la petición municipal y no se ejecutará la marina seca proyectada en Cala en Busquets. «El proyecto no se llevará a cabo si el Ayuntamiento se opone», apuntan desde la Conselleria, cuyos responsables rehusaron realizar más declaraciones públicas al respecto.
Aún así, el grupo municipal del PP volvió a la carga para reprender de nuevo la «falta de seriedad y responsabilidad» del equipo de gobierno. Los populares recuerdan que el PSOE y el PSM incluyeron el proyecto de la marina seca en el Plan General de Ports de 2023, llegando incluso a adjudicar los contratos necesarios para su redacción cuando el exconseller Marc Pons encabezaba la conselleria. Por eso, echan en cara a la izquierda que «ahora que el proyecto genera polémica, intente eludir toda responsabilidad dando la impresión de oposición mientras oculta información y cambia de postura según la presión social».
«No es un proyecto nuevo ni improvisado, sino fruto directo de la planificación socialista. Así que pretender desentenderse ahora es una falta absoluta de coherencia y respeto institucional», critica la portavoz Juana Mari Pons.
La diputada nacionalista Joana Gomila precisa, no obstante, que cuando era alcaldesa ya expresó su rechazo al proyecto en el seno del consejo de administración de Ports, del que formaba parte el pasado mandato.
Las críticas del tripartito
El gobierno de Ciutadella denunció ayer la «deslealtad institucional» del Partido Popular por contravenir en el Parlament balear los detalles del acuerdo que, menos de 24 horas antes, se había alcanzado en el pleno municipal con el voto favorable del propio grupo del PP.
Las portavoces del PSOE (Sandra Moll), el PSM (Maria Jesús Bagur) y Ciutadella Endavant (Carla Gener) comparecieron conjuntamente para mostrar su «sorpresa porque el PP se desmarcara en comisión o votara en contra del acuerdo que había tomado el pleno del Ayuntamiento». Una «falta de coherencia y criterio» que no variará la postura de los tres partidos coaligados en el gobierno municipal. Tanto que, avisan, «no impulsaremos ni cederemos ningún terreno municipal para llevar a cabo el proyecto».
Las tres concejales echaron también en falta que ni el conseller ni el director de Ports se hayan dignado siquiera a presentar el proyecto al Ayuntamiento, que se ha tenido que enterar de su tramitación por el informe de evaluación ambiental que requirió Ports al área de Medio Ambiente del Consistorio.
Durante la comparecencia, Sandra Moll también insistió en pedir a Ports que dé voz y voto al equipo de gobierno en el consejo de administración del ente portuario, ya que la actual miembro de Ciutadella es la portavoz del PP en la oposición, Juana Mari Pons, con la que el gobierno municipal no se considera debidamente representado. De hecho, la líder popular no se ha opuesto estos últimos meses al proyecto de Cala en Busquets, que solo ha rechazado cuando la petición conjunta de los restantes grupos y de la plataforma constituida por seis entidades y asociaciones de vecinos ha sido llevada al pleno.
«Uso partidista»
El PP replicó ayer mismo y acusó al gobierno tripartito de usar de manera «inaceptable» los canales oficiales de comunicación del Ayuntamiento para atacarles.
Escuché atentamente el pleno y quedó claro que fue el Psoe cuando gobernaba en el gobierno quien hizo el plan general de puertos y fueron los que contrataron el proyecto. No entiendo como pueden decir que no sabian nada si el alcalde se reunió con puertos en julio. Aquí alguien no quiere reconocer que se ha equivocado y no quiere asumir la responsabilidad. Pero teniendo en cuenta el esperpéntico espectáculo del Sr. Sanchez en el Senado, ya de nada me extraño.