«Sense mesclar, més clar, aigua!». Este es el título de la campaña de concienciación que acaba de lanzar el Ayuntamiento de Ciutadella, con la que pretende hacer un llamamiento a la responsabilidad ciudadana, para intentar solucionar la problemática de las aguas fecales que desbordan la estación de bombeo situada junto a Sa Platja Gran y provocan el cierre de la cala.
Como es sabido, cada vez que llueve algo más de la cuenta en Ciutadella se producen vertidos fecales en el Canal Salat, que llegan a la playa urbana. Esto ha ocurrido varias veces este verano, lo cual ha puesto de manifiesto una problemática «que es antigua», según apuntó ayer la concejal de Medio Ambiente, Maria Jesús Bagur, durante la presentación de la campaña.
«La solución no es fácil, no es de hoy para mañana y se sustenta en tres patas». El Ayuntamiento mejora la red de pluviales municipal y la segrega del alcantarillado en cada reforma viaria que acomete; la Agència Balear de l’Aigua i la Qualitat Ambiental (Abaqua) trabaja para mejorar la depuradora Sur y las estaciones de bombeo y alejar las instalaciones de Sa Platja Gran; y en tercer lugar es precisa la colaboración ciudadana. En Ciutadella hay «redes separadas» de pluviales y alcantarillado, pero no todas las aguas de lluvia procedentes de terrazas y tejados particulares van a parar donde corresponde, sino que en muchos casos desembocan en la alcantarilla. Esto provoca los desbordes que se han repetido con frecuencia el último verano.
La implicación es necesaria
La campaña se ha hecho mediante un contrato menor con el diseñador Ivan Khanet, que transmite de forma muy visual y clara la importancia de segregar aguas negras y pluviales. Con un juego de palabras, los vídeos, carteles e infografías inciden en la idea de no mezclar ambos caudales en origen, pese a la dificultad que se presenta a menudo, de no conocer como están hechas las conexiones bajo tierra.
El concejal responsable del Servicio de Aguas, Miquel Ametller, expuso que no es un problema menor, puesto que casi la totalidad del alcantarillado de la ciudad, también del polígono industrial, va hacia el Canal Salat, lo cual implica que todos los pluviales mal conectados también desembocan allí.
Para Bagur, «cada casa de Ciutadella debería tener claro adónde van sus aguas que caen de sus azoteas, terrazas y patios», de ahí que pidan colaboración a la ciudadanía. «Sí tienen una salida de pluviales en la acera o en la fachada, o cae del tejado a la calle, es que lo tienen bien» y si no lo hay un fontanero o un albañil pueden averiguarlo «fácilmente». Aún así, cuando haya dificultades para saberlo, «estamos a disposición desde el Servicio de Aguas, para ir a las casas a ver las conexiones», algo que se prevé hacer un día a la semana. A partir de ahí, cada propietario deberá acometer por su cuenta y coste la separación de las redes, a priori, sin necesidad de licencia de obra, «con una declaración responsable debe ser suficiente, pero lo dirá Urbanismo».
XxxAl menos se limpian los pueblos que están hechos TODOS una MIERDA ......