El Gobierno central insiste en que hay que paralizar las obras del enlace de Rafal Rubí, al considerar que afectan a la declaración de la Menorca Talayótica como Patrimonio Mundial, como ya ha advertido la Unesco.
Según el Ejecutivo, cuando la candidatura menorquina fue inscrita en la Lista de Patrimonio Mundial, el Comité de Patrimonio instó a «retirar a la mayor brevedad las obras viales parcialmente finalizadas» en Rafal Rubí. Por ello, sostiene que no solo debe detenerse el proyecto de rotonda y paso elevado que el Consell quiere ejecutar, sino también desmantelar el puente a medio construir.
«Las decisiones del Comité de Patrimonio Mundial poseen un carácter de mandato, dentro del contexto de la Convención de Patrimonio Mundial», recuerda el Gobierno y, por tanto, «deben ser acatadas por el Estado Parte y la administración competente en materia de patrimonio cultural», en este caso el Consell de Menorca. Sin embargo, el Consell ya ha manifestado su intención de retomar las obras a principios del próximo año tras el visto bueno del Tribunal de Contratos.
La postura del Gobierno ha sido difundida este viernes por el PSOE de Menorca, que ha hecho pública la respuesta parlamentaria a los diputados socialistas Pepe Mercadal y Milena Herrera. En ella se advierte de que, si no se siguen las indicaciones del Comité, la Unesco «podría en un futuro tomar medidas al respecto», aunque el Ejecutivo no concreta si esas «posibles consecuencias» podrían llegar a incluir la retirada de la declaración de la Menorca Talayótica como Patrimonio Mundial.
«¿Vale la pena enfrentarse a la Unesco?»
Desde el PSOE de Menorca han insistido en el argumento del Gobierno. «Las recomendaciones de la Unesco son mandatos con carácter vinculante que las administraciones competentes tienen la obligación de acatar», ha asegurado el secretario general de los socialistas menorquines, Pepe Mercadal, en su comparecencia con la consellera Susana Mora.
Mercadal ha criticado «el falso relato del PP» con el que esgrime que el Ministerio ha intoxicado a la Unesco envinado informes parciales, y asegura que «la Unesco siempre ha pedido que se retire el puente de Rafal Rubí, y por eso continúa pidiéndolo». En este sentido, defiende que el «criterio de la Unesco es muy claro, pide parar todas las obras irreversibles» y enviar «un estudio comparativo» de proyectos alternativos sin tanto impacto para el patrimonio.
El diputado socialista ha cuestionado si «vale la pena generar esta polémica, enfrentarse a la Unesco y al Ministerio, poner en riesgo la declaración de Patrimonio Mundial y gastar ocho millones de euros en un puente que no es necesario», a la vez que ha recordado que «existen alternativas más seguras, más baratas, más rápidas y con mucha menos afectación al patrimonio histórico».
Y como no se entiende para que esforzarse en sprrnder y comprender. Es más fácil despreciar y ya está.